De España a Chile: Alberto Millán y su experiencia como estudiante de intercambio en la Escuela de Trabajo Social de la UTEM

La Universidad de Zaragoza (Unizar) de España es una de las 90 Instituciones de Educación Superior que tienen convenio con la Universidad Tecnológica Metropolitana (UTEM). Por eso desde marzo, Alberto Millán Urgel, alumno de último año de Trabajo Social de Unizar, se encuentra realizando un intercambio en nuestra Casa de Estudios.

“Una amiga mía hizo el mismo intercambio en la UTEM, unos pocos años antes. Ella me lo recomendó. Me dijo que era bueno y que me lo pasaría bien. Entonces, esa fue una de las razones principales para venir”, cuenta el joven, quien agrega que antes de arribar a Chile, tuvo la oportunidad de conocer un estudiante de la UTEM que llegó a Unizar y que le explicó un poco sobre el país y sobre la Escuela de Trabajo Social.


Aunque sólo conocía algo de la historia chilena, su interés por ver cómo es su profesión fuera del continente europeo fue fundamental al momento de elegir nuestro país entre todas las opciones que le daba Unizar. “Primero, fue por la oportunidad de ver otros sitios, otras perspectivas. Creo que el Trabajo Social en Latinoamérica es distinto, entonces quería ver y aprender un poco y, bueno, también estaba la necesidad de salir de la casa de familia”, dice el joven, quien cuenta que aparte de lo académico, su gusto por la montaña y sus ganas de conocer la Cordillera de Los Andes, influyeron en su decisión de embarcarse en esta aventura.

Cambio de Perspectiva

Si hay algo que reconoce Alberto, es cómo la experiencia de intercambio transforma la mirada que puede tener un profesional. “Ves otro modo de entender las cosas, de entender la propia profesión, de cómo se dan las clases. Además, esto te obliga a salir de tu zona de confort. Mis compañeras que vinieron el año pasado vinieron juntas, pero yo este año he venido solo, sin conocer a nadie, sin conocer mucho del país, por lo cual estás totalmente fuera de tu zona de confort y tienes que adaptarte. Pero, de alguna manera, eso te sirve para aprender y también es algo que se disfruta mucho”, comenta.

El joven está cursando en la UTEM, asignaturas de segundo y cuarto año, lo que le ha permitido compartir más con sus pares chilenos y, también, identificar algunas diferencias entre su carrera en Unizar y la UTEM. “Me gusta que las clases sean más pequeñas, porque igual tenemos un trato más cercano con el profesor. Somos entre 10 y 20 personas, dependiendo del ramo, mientras que allá estamos 60, como mínimo. Entonces, el trato que tienes con los compañeros y con el profesor es muy diferente”, comenta.

A raíz de este intercambio en UTEM, Alberto cree que han surgido cambios en torno a su proyección profesional; de hecho, dice que se ha planteado profundizar en el área de la investigación e incluso realizar un doctorado más adelante. La razón está en las nuevas asignaturas y autores que ha descubierto durante su estadía en nuestra universidad.


“Por ejemplo, tengo un electivo sobre Socioantropología de las drogas y eso allá se toca muy brevemente; entonces, me ha interesado mucho la perspectiva y que sea parte de una asignatura en sí misma. Entonces, en ese sentido creo que la UTEM gana mucho con ese ramo en particular, pero también con otros como Salud Mental, que lo estoy disfrutando porque tiene una perspectiva más social sobre la enfermedad”, agrega.

Además, dentro de las cuestiones que destaca está la mirada crítica que caracteriza a la Escuela de Trabajo Social de la UTEM. Algo que le ha llamado la atención porque no sólo se manifiesta en sus ramos, sino también en el pensamiento de las y los compañeros, con quienes ha participado en otras instancias como la organización estudiantil La Huerta.

De la misma manera, ha compartido con académicos más allá de clases. De hecho, cuenta que ha recibido ayuda en bibliografía para desarrollar su tesis, trabajo que se encuentra realizando a distancia y de manera paralela a su intercambio en UTEM.

Scroll al inicio