Ronald Wood murió a los 19 años cuando estudiaba Contador Auditor en la UTEM, la que aún era el Instituto Profesional de Santiago (IPS). El joven fue acribillado por una patrulla militar en el Puente Loreto el 20 de mayo de 1986, durante movilizaciones ciudadanas. La Semana de la Memoria y los Derechos Humanos es un homenaje a su memoria, que forma parte de la historia de la comunidad universitaria, y constituye además un espacio para la reflexión sobre los derechos fundamentales de las personas.
La semana partió el lunes 22 de mayo en el Hall Central de la Facultad de Administración y Economía, con la inauguración de la exposición de arpilleras “Lucha por Verdad y Justicia”. Se trata de obras realizadas, en tiempos del autoritarismo, por madres, hermanas e hijas de personas detenidas desaparecidas, prisioneras y ejecutadas políticas, que expresaban a través de este arte textil sus esperanzas y demandas.
La muestra de 23 arpilleras forma parte de las colecciones del Museo de la Memoria y los Derechos Humanos. Fue presentada por la Rectora Marisol Duran Santis, quien manifestó el orgullo de la UTEM de realizar una vez más la Semana de la Memoria y los Derechos Humanos, recordando que fue una iniciativa que nació de los exestudiantes IPS–UTEM y que una de sus primeras decisiones como autoridad universitaria fue que este hito fuera nombrado “Ronald Wood”.
Expresó: “Las Universidades públicas y estatales tenemos la responsabilidad de formar profesionales de avanzada, pero con una mirada integral, que considere la Educación en Derechos Humanos, para formar a los ciudadanos y las ciudadanas que la sociedad chilena requiere. En ese sentido, la Semana Ronald Wood, la realizamos con la memoria viva para pensar en el fututo de una educación pública para la democracia y una convivencia social basada en el respeto a la dignidad y los derechos de todas y todos”.
La actividad contó con la presencia de Victoria Díaz, histórica integrante de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos (AFDD), hija de Víctor Díaz López, secuestrado en 1976, y que fue parte del taller de arpilleras que se formó en la Vicaría de la Solidaridad en esos años y fue voz del mundialmente conocido conjunto folclórico de la Agrupación.
En la oportunidad, Victoria compartió la experiencia familiar y personal de la desaparición forzada de su padre y la participación en la AFDD. Luego tomó una guitarra y entonó uno de los temas emblemáticos de la Agrupación: “Te he buscado tanto tiempo y no te puedo encontrar; he pedido, he clamado y nadie quiere escuchar”…
“Es muy emocionante estar hoy con estudiantes y ver cómo se trabaja la memoria. Si no le damos importancia a los muertos, ¿cómo nos van a importar los vivos y los que vienen? Es un trabajo que debemos hacer por nuestro futuro”, expresó.
En la actividad participaron Enrique Maturana, Decano de la Facultad de Administración y Economía; Víctor Osorio, Director de Relaciones Nacionales e Internacionales (DANeI), que además es el Coordinador del Programa de Derechos Humanos y Ciudadanía de la UTEM; Ángel Cabezas, Coordinador de Patrimonio y Ciudad de la Municipalidad de Santiago; y Patricia Saldaño, encargada del proyecto de conmemoración de los 50 años en esta corporación edilicia.
La semana continuó el 23 de mayo, con una exposición de 25 obras de Alejandro “Mono” González, reconocido y destacado artista visual, muralista y escenógrafo, con una opción temática por los derechos de las personas. Fue precursor del muralismo social en Chile y América Latina, hombre cercano a Roberto Matta y Premio Altazor. Ha realizado notables obras pictóricas urbanas en Chile, Canadá, Italia y China, entre otros países; ha diseñado escenarios en el Teatro Municipal y en importantes películas chilenas como “La frontera” (1991) y “Machuca» (2004), entre otras.
Esta actividad contó con la presencia del propio González; junto a Wanda Wood, hermana de Ronald Wood; Roberto Guerra, presidente del directorio de la Fundación Violeta Parra; David Espinoza, presidente del Centro de Alumnos del IPS en 1986 y representante de ex alumnos IPS–UTEM; y Paulina Cárdenas, Secretaria de la Facultad de Humanidades.
La exposición de las obras de Mono González contó con la visita de una gran cantidad de funcionarios y estudiantes de la UTEM, en particular del área de Diseño.
En la ocasión, se realizó el conversatorio “Arte Popular y Memoria Visual: la Obra Pictórica de Alejandro ‘Mono’ González”, el que tuvo como su moderador al Director Víctor Osorio. En el panel participó Virginia Benítez, profesional de la DANeI de la UTEM, Doctora en Ciencias de la Educación por la Universidad de París–Sorbonne, quien pronto defenderá su segundo Doctorado en Artes Visuales por la Pontificia Universidad Católica de Chile. De la misma forma, intervino Patricio Rodríguez–Plaza, Doctor en Artes y Ciencias del Arte por la Universidad de París I, Panthéon–Sorbonne, investigador en los Programas de Magíster y Doctorado en Artes en la Pontificia Universidad Católica de Chile. En sus intervenciones académicas, subrayaron la importancia de la obra del “Mono” González en la historia del Chile contemporáneo.
El propio creador cerró el papel, reflexionando sobre su recorrido. “Hay muchas de mis obras que hoy le pertenecen a la gente, ya no son mías”, expresó.
El miércoles 24, la Semana se trasladó al Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, en cuyo auditórium se realizó el lanzamiento de la segunda edición del libro “Operación Cóndor. Historias Personales, Memorias Compartidas”, que fue una publicación conjunta del Museo y Ediciones UTEM. Como se sabe, la “Operación Cóndor” fue una red secreta de represión conformada por los servicios de seguridad de las dictaduras de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay. El libro recuerda los casos chilenos de víctimas del Cóndor.
Dio la bienvenida a la actividad la Vicerrectora de Transferencia Tecnológica y Extensión de la UTEM, Claudia García, y María Fernanda García, directora ejecutiva del Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, las que presentaron a un panel de expositores que comentaron la obra, en el que participaron Marcia Scantlebury, presidenta del directorio del Museo; Víctor Osorio, coordinador del Programa de Derechos Humanos de la UTEM; y Francisco Ugás, abogado y consejero del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH).
A la actividad asistió una importante cantidad de estudiantes de la UTEM, que siguieron con atención las exposiciones que daban cuenta de este oscuro capítulo de la historia del Terrorismo del Estado en el Cono Sur de América.
Otro conversatorio llevado a cabo durante de la Semana de la Memoria, fue el jueves 25 de mayo en la Sala Amanda Labarca de la Casa Central de la Casa de Estudios, en este caso sobre Santiago Nattino, publicista, pintor y diseñador gráfico, y que fue uno de los tres profesionales asesinados en marzo de 1985 en el marco del “Caso Degollados”.
Con apoyo del Fondart, un proyecto de diseño e historia recopila sus obras, las cuales se muestran de manera permanente en la web, destacando su importante aporte artístico al país. Uno de sus creadores del sitio web de Memoria Histórica, Kim López, diseñador e investigador, expuso sobre la vida de Natalino y por qué decidieron realizar este trabajo. “Creo que este es un trabajo importe, pero recuerda no solo lo que le pasó a Nattino, sino quien fue, su historia y su obra. Elegimos a Nattino, quien es el más olvidado de los tres profesionales degollados. Antes de esto no había sido conmemorado por nadie, ni siquiera para los 100 años de su natalicio. No debe ser olvidado”, expresó.
Al conversatorio asistió su hijo Eduardo Nattino, que felicitó la iniciativa de la Universidad y también agradeció el trabajo de Kim López y su equipo, que llevan tiempo recolectando los trabajos de su padre. “Es algo muy significativo para nuestra familia. Aun me cuesta hablar de mi padre, contarles a mis hijos; todavía hay dolor, y este trabajo nos ayudó. Eso es muy importante”, señaló.
El último día de la Semana de la Memoria Ronald Wood comenzó con una visita guiada al Parque Por la Paz Villa Grimaldi. Entre 1973 y 1978 el recinto fue usado como centro de tortura y exterminio de personas. Es uno de los pocos espacios de este tipo en América Latina que ha sido recuperado y abierto al público. Se estima que unos 4.500 prisioneros políticos pasaron por esta cárcel secreta. El lugar se encuentra ubicado en la avenida José Arrieta en la comuna de Peñalolén.
Un medio centenar de personas entre alumnos/as y funcionarios/as de la UTEM se sumó a esta iniciativa para conocer uno de los lugares que devela las realidades que se vivieron en Chile durante la dictadura cívico–militar.
Para finalizar la jornada, a las 18:00 horas en el Salón de Honor de la Casa Central de la Universidad, se presentó la obra de teatro “Algo de Ricardo”, representada por el actor Juan Sánchez, quien fue recibido para culminar esta semana por el Director Víctor Osorio.
La obra trata de un actor es convocado a encarnar a Ricardo III en la obra de William Shakespeare. Sin embargo, la puesta en escena enfrenta variadas dificultades. El actor debe hacerle frente a una compleja realidad para lograr su cometido, casi igual que el propio Rey de Inglaterra. En un tono de comedia, la obra reflexiona profundamente sobre el rol social de las personas en sus respectivos colectivos.